Espacios virtuales

«Espacios Virtuales» por Mirta Narosky

En esta serie de trabajos mi propósito es el de generar espacios más virtuales que los posibles en una superficie rectangular o cuadrada. Me impulsa esta búsqueda, la convicción interna de que la realidad es ambigua, que deben relativizarse los valores, pues son cientos las alternativas vitales. Las creencias, las posturas frente a la vida, las ideologías son variadísimas y muchas de ellas llevan – por distintas vías – a la felicidad. Si existiese una verdad única no estamos capacitados, como seres humanos que somos, a dictaminar quienes la poseen. 
Lo que vemos no es necesariamente lo que “es”.
Para trucar la lectura juego con perspectivas recortadas, sombras proyectadas, volúmenes salientes, utilizando los laterales del bastidor y creando laterales ficticios. Pero sin salir jamás del plano. Engañando al ojo y demostrándole que no todo lo que la visión ordinaria cree real, lo es.
Ese es el desafío que me planteo en esta serie de obras que nace hacia fines de 1992 y que no sé hasta cuando, ni a donde va a conducirme.

Texto crítico:
Prosa de observación  – Raúl Vera Ocampo – Crítico de Arte

La aproximación a lo real sigue siendo a escasos años por terminar el siglo, motivo de exploraciones y ¿por qué no? de asombros. Después de siglos de vivir sujetos a características de representatividad que no variaban mayormente los cánones establecidos, la humanidad tiende a querer encontrarse con zonas mas profundas del conocimiento.
El arte y la ciencia, por caminos diversos, arriman conclusiones que no pueden obviarse: lo real y lo virtual confluyen en un universo inesperado e inquietante. Es lógico que los artistas de hoy quieran manifestar sus dudas y búsquedas a través de nuevos intentos expresivos.
Es de alguna manera lo que busca Mirta Narosky con sus planos recortados, sus “volúmenes salientes”, o recorridos y superficies que aparentan su ficción o, mejor dicho, su proyección ilusoria. Dentro del marco de la figuración, la artista conforma sus temas donde cierto sesgo simbólico y literario se articula con rasgos expresivos, identificados fuertemente con imágenes desligadas de campos anexos al expresionismo de los ochenta. 
De todos modos, el discurso de Mirta Narosky se nos presenta como adyacente a una postura que necesita repreguntarse afirmaciones fundamentales acerca de la vida y del destino del ser humano. No desde un punto de vista filosófico, sinon plástico y caracterizado por una significación que nos remite siempre al terreno estético.
Con esto quiero decir que la autora no trata de hacer retórica, sino que simplemente incursiona en el valle poco fértil  y plagado de incertidumbre que es la sociedad contemporánea, munida de un lenguaje pictórico que es su dimensión comunicativa.
Su creatividad se ajusta por cierto a la ambigüedad manifiesta y perceptivamente creo que el manejo plástico de volúmenes y soportes no convencionales, es una apoyatura para mantener el desarrollo la vivencia ideológica que su pintura aporta.
Desde este punto de vista, Mirta Narosky se inserta de una manera personal y al mismo tiempo firme, en las infinitas tentativas por recuperar de hecho esas oblicuas emanaciones que ostenta la condición humana.                                                                                                             

Mirta Narosky: doble juego, ensueño y fantasía –  Elsa Etchegaray – Crítico de Arte

El discurso pictórico de Mirta Narosky esta representado por el mundo de los opuestos. La cosmogonía de las imágenes de lo real y lo virtual se funde en una acertada simbiosis.
Lo bivalente de las realidades e irrealidades se torna muy notorio en toda la obra. La artista en su propuesta nos introduce en un clima verdadero, onírico y mágico a la vez: la atmósfera es envolvente y abigarrada. Al espacio predominantemente dramático y turbulento…
Juega con el marco de la obra – Una espacie de trompe l´oeil – …
Excelentemente logrado el doble juego de Mirta Narosky nos plantea en sus trabajos, sumado a ello la notable maestría del dibujo. Por momentos rozando el surrealismo, la artista encuentra sin lugar a dudas dentro de la estética actual, en la extraña encrucijada entre lo imaginario, la realidad.

Espacios mediáticos: Mirta Narosky y el arte de fin de siglo –  Graciela Ferrás – Socióloga

…Y aquel arte “comprometido”, de los “pintores del alma” (al decir de Mirta Narosky), utiliza la creatividad de los nuevos códigos para subvertir y cuestionar la superficialidad de las texturas en boga…
…La mezcla de sugestivos paisajes oníricos, reminiscencias del surrealismo, con cuerpos en aras del expresionismo sugieren una estética a modo de “pastiche”, la utilización de bastidores irregulares que burlan la mirada en ilusorio efecto de tridimensionalidad a modo de trompe l´oeil, trascienden los limites de la propia obra en constante invasión de los espacios del espectador, dando el efecto óptico de espacio virtual, nuevo régimen escópico de la posmodernidad, denuncia del “no-lugar”…
…La inestabilidad y metamorfosis de sus formas y figuras, denuncian la nueva estética social “neobarroca”: personajes monstruosos despojados de sus valoraciones éticas y estéticas en constante mudabilidad de sus formas marcan la inestabilidad social de la realidad actual. Estructura erótica de la obra, si, pero con cuerpos sin cuerpo, fantasmagoría de las formas que aluden a otras formas, efecto de ilusión óptica que funde lo real con lo virtual, yendo mas allá de lo imaginario, casi al filo del simulacro…
…Poli dimensionalidad, inestabilidad, metamorfosis, caracterizan la obra de Mirta Narosky en una encarnizada búsqueda creativa de formas de abrir nuevos espacios / tiempos para una nueva era de lo sensible…